¿El tema más discutido entre los arquitectos en este momento? Sin duda la Acústica. ¿Cuál es el aspecto innovador de este tema? Desde hace varios años hablamos de acústica en términos de aislamiento, de materiales aislantes utilizados dentro de las estructuras arquitectónicas, con el fin de garantizar el cumplimiento de los niveles establecidos por la ley. Con el cambio en las configuraciones del espacio, la tipología de vivir y vivir en los entornos de trabajo y domésticos, el enfoque se ha desplazado hacia el diseño de interiores, hacia la comodidad dentro de los entornos donde pasamos la mayor parte de nuestro tiempo.La acústica hoy finalmente se relaciona con el dimensión humana, a los hábitos de los usuarios y ya no sólo al aspecto arquitectónico estructural. Profundizando y realizando una investigación certera sobre los temas de la acústica, me topé con una realidad interesante y estimulante: el Slalom. Slalom es una empresa innovadora, centrada en el desarrollo y la investigación en el campo acústico, tanto en términos de know-how como de diseño. La filosofía de esta empresa se centra no sólo en desarrollar y ofrecer productos de altas prestaciones como los paneles acústicos en cuanto a absorción acústica, sino también en estudiar en profundidad los hábitos de los usuarios, la forma de vivir y utilizar el espacio, con el fin de garantizar el mejor confort interior. Por lo tanto, los productos no son vistos como simples objetos sino como parte integral del espacio, elementos estrictamente relacionados con el usuario. Slalom representa un verdadero punto de partida; una empresa que invierte en un nuevo concepto de confort interior, dando una fuerte señal sobre la importancia del bienestar en los espacios habitables. Slalom también está a la vanguardia en la investigación en colaboración con importantes universidades, en la organización de talleres y reuniones con diversos operadores del sector (arquitectos, empresas, ayuntamientos) con el objetivo de alimentar y crear un nuevo interés por la acústica y estudiar nuevas soluciones y escenarios de futuro.
Y hablando de escenarios futuros, encontré uno de sus talleres realmente esclarecedor, donde se analizó la acústica como un elemento físico del espacio y se consideró a la par con la luz y la temperatura interna. Esta consideración, que a primera vista puede parecer obvia, esconde en sí misma un paso realmente importante hacia el desarrollo de una nueva conciencia sobre el "sentir". Si tengo frío, por ejemplo, decido taparme; si el sol es fuerte, uso gafas de sol... ¿qué puedo hacer para mejorar mi confort acústico, mi sensación? Slalom ofrece una gran variedad de paneles fonoabsorbentes diseñados para satisfacer las necesidades de diferentes tipos de espacios: desde la oficina ambiente a restaurantes, de palacios de congresos a hospitales, de bibliotecas a aeropuertos… con el objetivo de crear un espacio abierto, acogedor, fluido, modificable. Los paneles acústicos Slalom ofrecen una gran variedad de colores, acabados y formas. Pero el corazón del producto, la estructura fonoabsorbente, proviene del mundo del automóvil y lo encontramos en todos los productos Slalom. Utilizar el saber hacer del mundo de la automoción es garantía de calidad y fiabilidad, siendo este el primer sector en la historia y tradición en diseñar y utilizar paneles acústicos de bajo volumen. La atención a los aspectos técnicos y de rendimiento se une en Slalom con el cuidado por el uso de materiales ecológicos, sostenibles y reciclables.La filosofía de la empresa es una filosofía "verde" a 360 °. Este aspecto también hace del Slalom una realidad innovadora y acorde con los desafíos de nuestro tiempo. El aspecto innovador de la empresa fue reconocido recientemente por Material Connexion, entre otros. Como arquitecto, creo que su apoyo a la hora de analizar acústicamente los espacios y recomendar la estrategia de corrección en los distintos proyectos es una ayuda importante para resolver siempre de la mejor manera posible el reto del confort acústico en ambientes interiores, convirtiendo así cada proyecto en un espacio de bienestar comisariado por la arquitecta Beatrice Fanchini